
María Blanco es una artista y arquitecta de interiores originaria de León, España.
En ocasiones trabaja puntualmente como diseñadora de interiores pero su trabajo es la pintura, la cual se basa en el uso varias técnicas entre ellas la acuarela y el uso de acrílicos. Estas técnicas la han permitido crear una brecha entre lo tangible y lo intangible, entre los límites velados. Todo este proceso, es reflejo de su formación arquitectónica y plástica donde su sensibilidad para los colores permite comunicar en cada una de sus obras sensaciones, con trazos totalmente coloristas y sutiles.
Su arte tiene tiene un gran sentido introspectivo, de contemplación, de interrelación entre el hombre y la naturaleza. Lo reinterpreta simplificando sus características a lo mínimo. Basado en elementos simples y en una armonía proveniente de un espacio asimétrico e inacabado.
Esto pone de manifiesto el valor que ella otorga a la imperfección, al carácter efímero de las cosas, al sentido emocional y de comunicación que establece con su entorno lleno de paz, son fiel reflejo de su concepto de belleza, dos de sus características distintivas la simplicidad y la naturalidad.